Tras el reciente capítulo número 46 de Dragon Ball Super, pudimos conocer muchos y nuevos detalles reveladores que nos darían a conocer más sobre la trama que se avecina, siendo la saga de Trunks del futuro, el merecedor de toda nuestra atención. Sin embargo,surgieron muchos cabos sueltos, que esperamos ansiosamente que se resuelvan en el transcurso de las semanas, pero aún así, comentaremos uno de los más mencionados.
Efectivamente, en el futuro todo ha vuelto a ser caos y destrucción, siendo la nueva amenaza una silueta de color oscuro con ojos completamente rojos y brazos rojos. Este es el enemigo conocido como Black Gokú, salvo que su forma real aún no ha sido revelada. En otros aspectos, vemos a Bulma, madre del saiyajin del futuro trabajando nuevamente en la máquina del tiempo, con el afán de reconstruirlo y darle más el combustible suficiente para que Trunks pueda viajar una vez más en el tiempo.
En el preciso momento en el que madre e hijo le dan los últimos retoques a la máquina, y al parecer, Bulma le estaría encargando todo lo necesario y un mensaje de ayuda a su hijo, es cuando aparece el nuevo villano. Escenas siguientes podemos ver cómo Trunks del futuro llora desconsoladamente, pues al parecer, su madre habría sido erradicada por el guerrero oscuro. Claramente, también podría significar que él estaría llorando porque nuevamente dejará a su madre sola ante tan caótica ciudad.
El capítulo ha sido considerado como uno de los mejores, sobretodo por los avances y el mini corto vídeo que se ha mostrado, pues estos le dieron toda la esencia necesaria para poder posicionarse próximamente entre los tres mejores capítulos anime de la semana.
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